La Colección Teodoro Vidal Santoni: una ventana al pasado
Julio E. Quirós Alcalá Director del Archivo Histórico Fundación Luis Muñoz Marín
Es curioso cómo los objetos cotidianos dejan de tener su uso común para convertirse en objetos de estudio, piezas que develan la historia de una sociedad. Este es el caso de una de las colecciones privadas más importantes y versátiles que ha servido a este propósito por más de sesenta años: la Colección Teodoro Vidal Santoni.
Esta colección etnográfica de arte y tradiciones populares, donada a la Fundación Luis Muñoz Marín en 1996, está compuesta por más de diez mil piezas que incluyen juguetes, herramientas, utencilios de cocina, objetos de uso personal, muebles, tejidos, fotografías, santos de palo, pinturas, grabados, mapas, instrumentos musicales, cestería y amuletos, entre muchos otros tipos de materiales. Este conjunto de cosas relacionada a la sociedad puertorriqueña comparte un criterio de selección muy especial y específico, adscrito por el coleccionista, que parte del imperativo de conservar para la investigación y para las futuras generaciones las mejores piezas y de mayor significado en los estudios etnográficos y culturales en Puerto Rico. Es por ello que esta colección no es un mero junte de cosas, sino un conjunto de materiales con una razón de ser.
Luego de varios intentos fallidos de adecuar la colección a una sede que le permitiera su organización, estudio y conservación, Vidal Santoni comienza a donar en 1996 parte de su colección al Instituto Smithsoniano en Washington, D.C. Ante esta acción propia de la desesparación y la incertidumbre por la suerte de sus objetos, la señora Victoria Muñoz Mendoza le hace un acercamiento para que done los artefactos, que aun mantiene en su poder, a la Fundación Luis Muñoz Marín. Es a principios de 1997 que comienzan a llegar a la institución las primeras piezas de la colección y que, simultáneamente, se inicia un proceso de catalogación e inventario de todos los objetos.
La Colección
La integración de esta Colección Teodoro Vidal Santoni a la Fundación Luis Muñoz Marín marcó un nuevo hito en la historia de esta organización estableciendo parámetros adicionales en su misión original consignando la conservación y el estudio de la historia cultural de Puerto Rico como uno de los propósitos organizacionales, usando esta colección como punta de lanza en esta nueva etapa institucional. Actualmente, la Fundación ha construido un moderno Centro de Visitantes dotado de un depósito especial para albergar la Colección Teodoro Vidal Santoni que permitirá de forma cómoda y eficiente la consulta de los objetos y la preservación de los mismos en un ambiente adecuado de conservación.
Definitivamente cada una de estas piezas, no importa su tamaño, formato o material de construcción, permitirá a los puertorriqueños acercarse a su pasado para comprenderlo y entenderlo. Ese es el legado de la Colección Teodoro Vidal Santoni para la presente y futuras generaciones de puertorriqueños.